Visto que últimamente el fútbol ocupa gran parte de la actualidad blogera de Crítico Sin Criterio, hoy voy a traeros a todos de nuevo a la realidad… porque los millones que mueve la mafia de Raúl y sus esbirros me la traen al fresco cada vez que leo cosas como la siguiente: Según un estudio de Manos Unidas, una de cada tres mujeres será víctima de violencia física o abuso al menos una vez en su vida.
Tiene tela la cosa. Parece que es algo que nunca nos va a afectar, casi nos estamos acostumbrando a que los maridos, parejas o exparejas maten a sus mujeres, compañeras, exnovias, etc. Digo casi porque como hablábamos María y yo el otro día, dejamos que los políticos nos aturullen la cabeza con el grave problema de ETA, una banda terrorista que en los últimos cuatro años a matado a 4 personas (es una guarrada que hayan muerto esas cuatro personas, nadie lo discute, ni nadie deja de condenarlo) pero ¿cuántas mujeres murieron a por violencia de género (mierda de denominación) el año pasado? 71 mujeres… y ¿cuántas llevamos ya en 2008? 15 mujeres. ¿Acaso no estamos ante un problema mucho más grave que el caso del terrorismo nacionalista? Parece que no, puesto que ETA es lo única discusión que genera tensión política en los circos televisivos. Qué triste!! De verdad…
Es triste porque puede que esa una de cada tres sea yo mañana, o mi amiga o la de más allá o una anónima… da igual quién sea, habrá muerto, habrá dejado de vivir porque algún indeseable se creyó con poder suficiente para quitarle lo más valioso a otra persona. Aunque no calificaría a ese indeseable de persona, precisamente.
Es triste que tengamos que levantarnos cada día con historias como estas… Es triste que llegue al trabajo y mi compañera me cuente que de la que iba a coger el autobús salía una chica gritando del portal porque la acababan de violar… a las 9 de la mañana, en pleno centro de Madrid… ahí está el número uno de esos tres que calculan las estadísticas…
Señor-ina
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