Hace unos días llego a nuestra redacción una carta con un escalofriante testimonio. Por motivos de seguridad no podemos hacerla publica íntegramente, ya que il’Mágico’ nos ha pedido que no desvelemos que él es el afectado, permitiéndonos a cambio de nuestra total discreción, desvelar el 20% del contenido de tal documento, ya que –en palabras del joven- “25 es mucho y 15 es poco”.
“Hace unos meses encontré la etiqueta de oro de Nescafé. Que alegría, que ilusión. Un sueldo de 2000 euros al mes ‘para toda la vida…’. Deje mi trabajo, adelante todas las letras del coche, y me mude a un loft en el centro. Toda mi vida era una maravilla hasta hace un par de semanas. Un día caminando hacia mi casa, sentí que alguien me seguía, lo intuí por el sonido de sus zapatos italianos y por un inconfundible aroma a la mejor selección de granos recién tostados, intenté despistarle dando un pequeño rodeo y lo conseguí. Llegue al portal y cuando ya estaba girando la llave, un hombre susurro cantando en mi nuca: ‘Con nescafe, afortunado de por vidaaaa…’. Me di la vuelta, y no había nadie. Esto se repitió día tras día hasta hacerme perder la cabeza, vivo desquiciado, veo señores en cada esquina, con impecable traje, que me dicen ‘Cuando arrivo a caaasaaaa…’, me guiñan el ojo y me apuntan con el índice a modo de pistola
Esto ha hecho que me plantee algunas cosas, y haciéndome miles de preguntas llegue a la más importante. ¿Hasta que punto le conviene a Nescafé que yo siga con vida? ”
“Hace unos meses encontré la etiqueta de oro de Nescafé. Que alegría, que ilusión. Un sueldo de 2000 euros al mes ‘para toda la vida…’. Deje mi trabajo, adelante todas las letras del coche, y me mude a un loft en el centro. Toda mi vida era una maravilla hasta hace un par de semanas. Un día caminando hacia mi casa, sentí que alguien me seguía, lo intuí por el sonido de sus zapatos italianos y por un inconfundible aroma a la mejor selección de granos recién tostados, intenté despistarle dando un pequeño rodeo y lo conseguí. Llegue al portal y cuando ya estaba girando la llave, un hombre susurro cantando en mi nuca: ‘Con nescafe, afortunado de por vidaaaa…’. Me di la vuelta, y no había nadie. Esto se repitió día tras día hasta hacerme perder la cabeza, vivo desquiciado, veo señores en cada esquina, con impecable traje, que me dicen ‘Cuando arrivo a caaasaaaa…’, me guiñan el ojo y me apuntan con el índice a modo de pistola
Esto ha hecho que me plantee algunas cosas, y haciéndome miles de preguntas llegue a la más importante. ¿Hasta que punto le conviene a Nescafé que yo siga con vida? ”
Redactor jefe: il`M´
Ministro de Cultura y guionista
1 comentario:
A la atención de la junta de dirección de Nescafé... Conozco a un tipo que por 3000 euros trabajito os soluciona el problema
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